El camino hacia la paz empieza en las urnas

El pasado 26 octubre se presentó oficialmente Amaiur, el nuevo partido político vasco, en un acto celebrado en San Sebastián, con el objetivo de concurrir en las próximas  elecciones generales del 20-N. Amaiur es una coalición política conformada por Eusko Alkartasuna, Alternatiba, Aralar e independientes de la izquierda abertzale. El secretario general de EA, Peio Urizar declaró que: "Amaiur viene a dar respuesta al proceso político que vive Euskal Herria. Nace para trabajar a favor de la resolución del conflicto político y lo va a hacer en campo ajeno, en Madrid, llevando la voz del soberanismo y del independentismo hasta el núcleo mismo de la negación de los derechos nacionales de nuestro pueblo". Además, reivindicó el "derecho a vivir en paz" y abogó por "construir entre todos una paz justa y definitiva".

La presentación de Amaiur a las elecciones del 20-N, nace tras el comunicado emitido por ETA el pasado jueves 20 de octubre, en el que anunciaba el "cese definitivo" de la violencia terrorista y pedía abrir un "proceso de diálogo directo". Amaiur es la respuesta pacífica y democrática que defenderá las ideas de la izquierda abertzale en las urnas. En ese sentido, no podemos negarnos a impedir su participación si queremos verdaderamente solucionar el conflicto vasco. La sociedad española debe de permitir que el pueblo vasco escoja a sus representantes políticos para que afronten el proceso de paz que se inició tras el comunicado. Y sí, tendrán que haber concesiones, ya que sólo así se podrá normalizar el proceso de paz sin que hayan vencidos ni vencedores. La política de alejamiento de los presos de ETA ha sido sin duda “un duro sufrimiento para los familiares de los presos” tal y como expresaba un afectado, en el magnífico documental del programa “Salvados” de laSexta: Borrando a ETA. Un gran trabajo periodístico objetivo, que recoge la pluralidad de opiniones sin prejuicios, tal y como ha defendido más de una vez el periodista, escritor y diputado de CIU, Vicenç Villatorio, quien acusa a muchos medios de “romper las reglas periodísticas”, al mezclar la opinión y la noticia, y producir una crispación añadida al conflicto. Con la presencia de Amaiur en las urnas, se permite  que esa pluralidad que se percibe en las calles vascas, pueda manifestarse de forma democrática y que el pueblo vasco pueda escoger.

En definitiva, es muy importante que Amaiur pueda presentarse a las próximas elecciones generales sin que haya impedimentos legales. Solamente así, éstas serán más democráticas y podrán recoger las distintas sensibilidades del pueblo vasco. Si verdaderamente queremos acabar con el terrorismo y la violencia, tenemos que hacer todos un esfuerzo. Por un lado, ETA debe de continuar dando pasos hacia la confirmación de su renuncia definitiva de la violencia, disolverse para siempre y tratar de defender sus ideales y lograr sus objetivos a través del juego democrático. Para ello, es muy importante que reconozcan el daño que han causado.  Por otro lado, la sociedad española debe de estar preparada para perdonar sin tratar de humillar, aunque recuerde los 43 años de terrorismo y las 829 víctimas mortales. El perdón no se consigue de un día para otro, pero hay que apostar por la convivencia. El proceso de paz que se inició tras el pasado comunicado de ETA será largo y difícil, pero debemos de tener esperanza. Más tarde o más temprano deberemos de aprender a respetarnos y a convivir. Para ello será necesario hacer un esfuerzo para comprender y respetar las distintitas sensibilidades del pueblo vasco, incluidas las que abogan por la independencia, si así queda reflejado con el éxito en las urnas de la izquierda abertzale. Como ha pasado en otros procesos de paz –por ejemplo el fin de EL IRA- el estado, tendrá que realizar concesiones y también reconocer que ha causado sufrimiento a parte del pueblo vasco. En una guerra no hay verdaderos ganadores, todos pierden. El éxito es que es que se produzca el cese de la violencia. Sin duda, lo más importante es que el pueblo vasco deje de sentir miedo por expresar lo que piensa, sea en una dirección u otra. Debe primarse la libertad de expresión la pluralidad democrática. La presencia de Amaiur en las urnas es un paso importante en ese sentido y el comienzo del camino hacia la paz definitiva. Hagamos un esfuerzo y permitamos que ésta se produzca, para que ningún vasco o habitante del resto de España vuelva a tener miedo y pueda realmente sentir la libertad. El ser humano debe de aspirar a ello, permitámoslo.

Samuel López.