Muere Leslie Nielsen, uno de los grandes de Hollywood

-Apareció en más de 100 películas, protagonizó un sinfín de series de televisión. Siempre caracterizado por su pelo blanco y su particular modo de hacer humor, supo crear un estilo único y personal que le hizo inconfundible.-

Hoy el cine cómico está de luto, Leslie Nielsen, uno de sus principales representantes falleció esta noche a sus 84 años a causa de una neumonía que le tuvo convaleciente casi dos semanas. Según un comunicado remitido por su agente el actor murió en un hospital cercano a su domicilio de Fort Lauderdale, en Florida, rodeado por su esposa y amigos.

Nacido en Canadá en 1926, Nielsen creció en un ambiente poco deseable. Su padre era estricto y violento y a menudo repartía bofetones sin una razón plausible. Pero el pequeño Nielsen pronto encontró la solución: si hacía reír a su padre se ahorraba los varapalos, y así, de este modo tan peculiar, desarrolló su infinito sentido del humor.

Leslie llegó a Hollywood en los años 50, después de haber protagonizado alguna que otra serie de televisión y de inmediato empezó a actuar como galán. Su altura y porte eran los idóneos para haber sido uno de los míticos apuestos del cine, pero él tenía otros planes: Él quería vivir del humor que siempre había corrido por sus venas, solo necesitaba la oportunidad idónea para mostrárselo al mundo. Esa oportunidad llegó en el momento más inesperado con la saga “Aterriza como puedas”, y con ella se consagró como uno de los grandes del cine cómico.

Tras su primer trabajo humorístico, empezaron a lloverle trabajos similares. “Despega como puedas”, “esquía como puedas”, “Scary movie”...Nielsen se convirtió en alguien imprescindible en Hollywood. Actuó en más de 100 filmes, participó en unas 150 obras de teatro e intervino en diferentes programas de televisión. Su trabajo fue galardonado con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood en el año 2002.

Pero sus amigos y compañeros le recuerdan no solo como un gran actor, sino como una gran persona. Siempre dispuesto a arrancar sonrisas, siempre dispuesto a hacer bromas y siempre dispuesto a ayudar a los demás. Nielsen fue embajador de Unicef en Canadá y no dudó jamás en ofrecer su apoyo a multitud de organizaciones benéficas. Tanto que en 2004 recibió un homenaje en la gala "So the World may Hear" por sus ayudas humanitarias.

Hoy el mundo ha perdido a uno de los grandes, una de esas personas que deberían vivir por siempre. Pero tanto los que le conocían como los que no siempre tendrán el mejor recuerdo de él. Siempre que recordemos a Leslie Nielsen recordaremos su risa, su gran humor y su felicidad. 

                                                                           Por Mariola Terol Sánchez